viernes, 1 de febrero de 2008

LO IRRACIONAL DEL EJÉRCITO. Miguel Requena

En el mundo antiguo, las malas cosechas conllevan hambrunas, enfermedades y muertes. Estas malas cosechas se producían por castigo divino. Temen a los dioses, crueles, caprichosos… en cualquier momento, disgustados castigan con estas malas cosechas. Cuanta más seguridad, menos temor… pero en la antigüedad no era así por lo que debían honrar a los dioses y hacer sacrificios, y hacer la Pax Deum o Deorum, que es la paz o concordia con los dioses. Si nosotros no tenemos problemas con los dioses, no habrá castigos, no al contrario.
¿Cómo se establece la paz? Es una cuestión ritual: sacrificios correspondientes al calendario pues ese calendario lo establecen los dioses. Con esto se soluciona la relación entre mortales e inmortales, fijando la relación festiva. En el momento en el que no se cumplen los preceptos de esa paz, los dioses dejan de favorecernos.
¿Quiénes son los dioses? El mundo antiguo esta lleno de dioses. Los romanos los dividen entre celestes (del cielo como Júpiter, Afrodita…) pero también están los infernales (los que viven en el submundo o inferno, como Hades, Perséfone… y todos los muertos) a los que deben sacrificios de animales oscuros y número par, mientras que a los celestes todo lo contrario. Todo aquel que muere se convierte en un dios o man, que exige las mismas ceremonias que los dioses tradicionales, y debían ir la familia al lugar del enterramiento y llevar a cabo sacrificios, libaciones… periódicamente ofrendas… (Hoy en día, las flores es un sacrificio incruento). A los antepasados se les sacrifica de igual modo, lo que pasa es que solo les honra la familia y tienen menos fuerza que divinidades honradas por todo el imperio (igual que el emperador, honrado por muchos). Un damon, es el espíritu de un muerto, y que si no es honrado puede ser vengativo, y una vez al año se quita la piedra del mundus para visitar la tierra.
En el mundo antiguo, la muerte es algo dramático, según se creía en la antigüedad, si se muere de causas naturales por las parcas y se siguen los ritos de enterramiento, la persona muerta es dios y descansa en el inferno. (Incinerado y enterrado, sacrificios, sobretodo de sangre).
En los casos en los que el que muere, no descansa en el infierno:

1- Cuando el difunto no recibe los ritos establecidos de enterramiento y permanece como lemur en el mundo de los vivos. Es dramático no encontrar el cadáver porque no va a descansar y por lo tanto va a ir causando problemas a los vivos y sobretodo a los miembros de su familia. La familia existe porque es necesario tener hijos varones q mantengan el culto familiar que entierre al pater familia y continúe con los ritos.
2- Esa persona que muere antes de que las parcas lo decidan, no descansa hasta que se cumpla la edad que las parcas habían decidido. Al muerto se le tiene que enterrar con todos sus miembros (cabeza, brazos…) porque sino no descansa.
3- Muerte cruenta. Todo asesinado, antes de que las parcas lo establecieran y encima de forma violenta. En el campo de batalla es donde más gente muere violentamente aunque se legalice por la legalidad de la guerra lo cual hace que se convierta en divinidad pero perseguirá a su asesino. De ahí el miedo a espíritus en el campo de batalla. Los ejércitos tienen que defenderse de estos espíritus a través de ciertos elementos. ( más adelante explicado)

Desde que una persona muere hasta el entierro es un momento en que brujas lúgubres que se presentan ante el difunto, coge un trozo de lengua y se lleva el espíritu. Así lo utiliza para hacer el mal a otra persona. Esto es la Necromancia. Se apropian de espíritus.
Los cementerios se rodean de murallas pues son límites del mundo protegido por los dioses del exterior repleto de espíritus malignos, y así no salen del cementerio. Igual pasa con las murallas de la ciudad, para que no entren los malos espíritus, creando un recinto sagrado.
Los espíritus hacen daño al que vive como el que esta en transición. De aquí el uso de talismanes…etc.
Así se entienden los miedos… pues los dioses se van y los espíritus pueden provocar enfermedades etc.

Hay 2 instituciones que reflejan ese miedo a espíritus malignos:

- El trofeo o tropaeum: Cuando un ejército vence, con los despojos de los vencidos se construye un monumento, amontonándolo todo en un árbol y más tarde, verdaderos monumentos. El trofeo se levanta en el lugar de la victoria, y en batalla naval, en el punto de tierra más cercano. El objetivo es 1º señalizar una victoria. Hoy se piensa que es una forma de neutralizar los espíritus malignos de los muertos en al campo de batalla.
El círculo es un símbolo que juega ese papel de límite sagrado para proteger (corona de laurel, muralla, triunfos…).

- El Triunfo: Es el honor más grande a un general. Supone la entrada de un general victorioso a una ciudad, divinizado, en carro con caballos blancos… Hay requisitos para que se de este privilegio y luego ser aprobado por el senado. El ejército vencedor debe permanecer fuera de la ciudad, en el campo de Marte para limpiarse o lustrarse, ellos y sus armas y deshacerse de los lemures. Una vez purificado, se entra por las famosas puertas del triunfo. La puerta es el elemento apotropeo que rompe el círculo de la muralla, rompe la protección. La muralla o temenos puede ser simbólica. Las puertas tienen que estar protegidas pues junto a los guerreros pueden entrar los espíritus. También se colocan en puertas figuras de leones u otros animales, tienen una función apotropea para evitar la entrada de estos espíritus (también sucede con todo lo escatológico).
El ejército entra por el arco, limpios, con amuletos (escudos con animales salvajes para rechazar espíritus). Entran y surge el problema de la envidia (videre, ver, que te miren con malos ojos) o el facinum, que es un falo enorme (los niños llevan la toga preatesta con franja púrpura y el colgante), el general puede ser envidiado y puede ser insultado por lo que lleva amuletos etc. y esto es provocado por los lemures o a lo mejor dioses que envidian también a ese general. Los insultos son protectores…

Antes de una batalla hay que consultar a los dioses que pueden mostrar su rechazo con los prodigios. El texto de Silo Itálico, relata la gran derrota de Trasimeno. Normalmente se llevaba una jaula con pollos, los soltaban a comer y si comían trigo, tranquilos sin pelear, y enteros… pero si no comen y mueven el ala es un mal augur o presagio.
El animal debe aceptar el sacrificio del q es protagonista, va el al altar y lo sacrifican, pero si huye mal. Se le ponía mola salsa para que el animal asintiera intentándoselo quitar y así asentía y era un buen presagio. En el texto, al hacer el sacrificio brota sangre negruzca: mal prodigio.
Pese a los malos prodigios, Flaminio lo ignora, va a la batalla y supuso una gran derrota.

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